En pocos años, las newsletters, o boletines informativos, han ganado peso en la comunicación de las organizaciones, tanto internamente como externamente. Porque son relativamente sencillas de preparar, muy versátiles y pueden tener una amplia difusión si se dispone de una buena base de datos de contactos. Además, no son tan invasivas como otras fórmulas de comunicación: simplemente, nos aparecen en la bandeja de entrada del correo electrónico y nosotros decidimos si solo las hojeamos o las leemos enteras y en qué momento y cómo.

Desde Síntesi, hemos hecho y hacemos newsletters de muchos formatos distintos, y hace ya años que pregonamos sus beneficios:

• Información fiable. Las newsletters pueden llegar a ser el principal medio de comunicación para los públicos internos, aportando a todo el mundo y al mismo tiempo información fiable y precisa, desmontando la hipotética rumorología que puede existir cuando la información no se traslada de manera adecuada. 

• Segmentación. Los boletines son muy flexibles y se pueden adaptar a todos los públicos externos de la organización, desde los clientes o usuarios hasta los proveedores o la población en general. No todos han de recibir la misma información presentada de la misma manera, porque cada público tiene sus propios intereses. Poder segmentar el discurso es una de las ventajas de este canal de comunicación, sin que los costes se disparen.

• Periodicidad. Las newsletters, por definición, son periódicas. La periodicidad que queramos. Las hay mensuales, quincenales, semanales y hasta diarias. El hecho de llegar periódicamente al correo electrónico de nuestros receptores nos facilita mantener la comunicación abierta con ellos, de manera regular, y ser punto de referencia y, a la larga, incluso prescriptores de nuestro ámbito.

Las herramientas actuales permiten que este tipo de boletines puedan incorporar todo tipo de materiales, desde los tradicionales textos escritos hasta imágenes (fotos, vídeos, gráficos…), piezas de audio y otros contenidos. Esta versatilidad en el formato también aporta flexibilidad en los contenidos: podemos dedicar espacio a la información de tipo más corporativo, reservar apartados para cuestiones destacadas de nuestro sector, informar de novedades que consideremos interesantes (tanto internamente como externamente) o, también, poner algún toque de humor cuando convenga.

Como decía antes, en Síntesi hemos preparado y preparamos newsletters de todos los colores. Desde boletines absolutamente corporativos para públicos internos y externos hasta otros que sirven, con un tono más desenfadado, para la cohesión de la plantilla interna. Porque las newsletters tienen esto: se adaptan a nuestras necesidades comunicativas, sean las que sean.